lunes, 26 de julio de 2010

MI PRIMERA VIDEOGRABADORA

En mi experiencia personal, no tuvimos en casa una videograbadora en los 80’s; pero mi tío Eduardo, quien era y es “el poderoso” de la familia, en un viaje que hizo a inicios de esta década por varios países, trajo entre otras cosas, una enorme máquina Betamax, hecha en Japón por Toshiba, cuya característica resaltante a mi parecer, era su control remoto con cable (cuantas veces, cuando iba a su casa y usaban el Beta, me tropecé con ese cable y lo hice rabiar).

Recuerdo especialmente haber visto una película de terror (que desde niño me encantan) llamada “El Manto de la Momia”, maravillado por los colores de su TV de 19 pulgadas (en mi casa los dos TVs que habían eran B/N) y por el hecho de que la peli no venía de un canal, sino de esa interesante caja debajo del TV.

Algunos años después, en 1989, mi hermano se casó, independizó y compró para su casa un moderno TV Sony de 14 pulgadas con control remoto y un Sony Super Betamax Sony de funciones básicas, en el recordado Polvos Azules que se encontraba al costado de Palacio de Gobierno. Hizo esta compra basado en que el Beta ofrecía mejor calidad de imagen que el VHS. Si bien esto era cierto, también lo fue que para ese entonces la guerra entre ambos formatos ya la había ganado el VHS, ofreciéndose en esta tecnología la mayor variedad de pelis de esos años.

Por este motivo tuvo que adquirir un VHS y descartar su Beta, el cual acepté con mucho entusiasmo cuando ofreció regalármelo, allá por el año 1992 (siendo mi primera videograbadora). Lo curioso, es que ¡hasta hoy lo tengo y funciona bien!

lunes, 5 de julio de 2010

¿BETAMAX O VHS?

Que persona en los ochenta, interesada en comprar una videograbadora y tener con ella una especie de cine en la sala de su hogar, no se hizo esta vendita pregunta, ¿compro un Beta o un VHS?



Si bien es cierto que ambos formatos pertenecen a mediados de los 70s (primero en 1976 saldría el Betamax respaldado por Sony y un año después el VHS - Video Home System - de JVC), en nuestra Lima recién serían medianamente populares en los 80s (digo esto de medianamente, ya que su costo era elevado y fueron adquiridos por familias de cierto poder adquisitivo, en contraste a lo que hoy sería el DVD, donde hay variedad de modelos y precios, siendo algunos muy económicos y mucho más accesibles que las videograbadoras en los 80´s).



Técnicamente el Beta era superior que el VHS, ofrecía mayor resolución de imagen y casetes más pequeños; a pesar de que el fuerte del VHS era el mayor tiempo de grabación que soportaba. Debido a políticas de Sony que quiso monopolizar su formato y a los costos del mismo, éste fue perdiendo terreno. Aun así, en muchos hogares limeños fueron usados, tanto para ver películas, así como formato para perennizar eventos y recuerdos cotidianos (a través de las videocámaras Betamovie). 

Gracias al apoyo de varios fabricantes, a la baja de costos y a que en 1988, Sony admite el fracaso del Beta frente al VHS y anuncia la fabricación de una línea de videograbadoras en ese formato; es que el VHS se consolida como la tecnología de vídeo casero que reinó por varios años en nuestros hogares, hasta la aparición del DVD a mediados de los 90s y su masificación a finales de ésta década.